viernes, 8 de abril de 2011

¿Y si has confundido la pre-entrega con el pasaporte?

Para variar, desastre total de organización. 

((pausa dramática))

Los minutos se suceden en mi reloj, en menos de 4 horas estará tocando la corneta por mi casa para marchar a la senda de Barajas  y yo sigo con la maleta a medio hacer. Siento no haber podido subir nada, pero entre mis sobrevaloradas aptitudes naturales para el desorden y que he perdido mi astrolabio, he fallado en varias horas en la estimación del aprovechamiento de esta tarde, y no me da tiempo a escanear los distintos croquis sobre los que estoy trabajando. 

Aunque no debería, me descontrolo y escribo que he estado un tiempo enfurruñado con el ejercicio, y que aunque en los dibujos parezco volver reiteradamente sobre algunos aspectos (o eso me creo yo), me está costando terminar de entender lo que (sospecho) estoy buscando. Sin embargo, vivo plenamente convencido de que estos días en Venecia me van ayudarán a cristalizar de alguna forma todas las cosas que están girando ahora mismo en mi cabeza. Aprovecho y cierro, casi precipitadamente, con este tono enigmático, y lo dejo todo en incógnita (¿?). 

(( Mientras parpadean las estrellas, el chico se atusa cuidadosamente un mostacho de bucanero invisible mientras comienza  a reajustar sus operaciones para la traca de vuelta de Semana Santa...se mira con orgullo en el reflejo de la ventana, ¡anda, mira dónde ha tenido a gusto esconderse el astrolabio! ))

No hay comentarios:

Publicar un comentario